nuevo parte desde la UCI

El parte.

Meses de angustia, también de rabia, de impotencia, de cansancio, de agotamiento. Meses de aguante, de paciencia de querer creer que tiene que haber una solución. Meses de negociaciones, de desconfianza seguro que también, de necesarios cuestionamientos y recelos; y meses de profesionalidad, de experiencia y de contactos.

Parece que después de todos estos meses en los que lo que reinó era un silencio de cuidado intensivo, detrás del cual hubo esfuerzo y compromiso para encontrar un remedio capaz de mejorar el estado grave, casí irreversible, del paciente; capaz de hacernos pensar a los que no creemos en milagros, que puede haber otro final que no sea la muerte……., parece que después de todos estos meses el paciente responde favorablemente.

Traslado a estación.

En los últimos días se atropellan las noticias que así nos lo hacen pensar, y como me lo quiero creer, como es mi firme deseo _a pesar de algunas dudas y algunos recelos, que también me asaltan de vez en cuando_ me alegro, cautelosamente, pero me alegro, por los trabajadores y por el oficio. Queda mucho camino por recorrer, mucho abandono por compensar, mucha ignorancia que combatir y mucha confianza por recuperar. Si las voluntades se juntan y las intenciones son buenas, puede que aún se llegue a tiempo. Quiero creerlo.

Pero.

He de suponer que si salen estas noticias de forma „apelotonada“ (por decir algo, pues toda la batalla de los últimos meses, lamentablemente, no encontró mucha repercusión en los medios en general) es porque hay hechos concretos y compromisos firmados que las avalan. Si no fuese así, no creo que se llegaría a lanzar esta primera olita de campaña de marketing. Aunque no se sabe cómo se van a concretar, porque se desconocen tanto los detalles de las negociaciones habidas, como de los futuros proyectos y las personas y entidades implicadas, tengo que creer que la intención es la mejor.

Cierto, hay algún que otro „pero“, que nace más en las tripas que en la cabeza. Hay un „pero“ de más comunicación y transparencia, también retroactiva. Hay un „pero“ respecto de la eterna amenaza de privatización. No tiene por qué ser mala de por si, pero cuando se trata de un entramado complejo de producción, difusión y formación, de fondos publicos y privados, de planteamientos empresariales y lucrativos, y de valores inmaterial y patrimoniales, tengo que reconocer el escalofrío que me produce y lo mucho que me cuesta juntar un crédito en confianza lo suficientemente grande como para quedarme tranquila. Quizá incluso eso es bueno, esta porción de cautela y desconfianza que hace que no nos desentendemos, que como ciudadanos exigimos tomar parte activa en este relanzamiento, para que no vuelva a pasar lo que pasó en el pasado y lo que pasó y pasa en otros ámbitos. Pero también está claro, que esta exigencia de un „más“ en participación activa,  es difícil de lograr si se sigue el rumbo de la privatización.  También tengo mis dudas sobre si el resultado final realmente va a consistir en un reforzamiento del oficio o si, al contrario, acelerará su desaparición. Esto dependerá en gran medida del dónde se colocará a largo plazo el umbral de viabilidad y rentabilidad. Desde mi condición de artista y artesana, toda mi energía va enfocada en mantener la autenticidad del proceso, la esencia del oficio, y recuperar y garantizar a largo plazo la transmisión del saber acumulado y la dignidad y el reconocimiento de los profesionales que lo ejercen. Reconozco que convertir estos objetivos en económicamente rentables no es fácil. La formación de nuevos tejedores requiere una gran inversión en tiempo y dinero, los ciclos de  producción son lentos, los productos pocos y caros. ¿Se puede combinar la apuesta por la excelencia y una filosofía empresarial un tanto elitista, que podría entenderse como garante de la faceta económica, por un lado, con el trabajo de base y la apertura a la ciudadanía, necesario para que la RFT consiga salir del rincón sombrío y solitario en el que vegetó de mala manera los últimos años, por el otro, y además con cierta pureza, o al menos fidelidad con los planteamientos esenciales que subyacen y sostienen  el oficio?  Como siempre, el arte reside en encontrar el frágil equilibrio y mantenerlo a lo largo del tiempo.

Así sea.

Os dejo aquí las noticias que he encontrado en los medios. Como mera observadora desde la distancia no me queda otra que depositar mi confianza en que la  constelación se mantenga favorable, y que el cambio de personal, tanto en la gerencia de la RFT, como en el ayuntamiento, y con ello el aporte de voluntades, de contactos, de experiencia e imaginación, sea capaz de construir un clima de colaboración y decidida apuesta por la continuidad y la puesta en valor del patrimonio, del oficio y de la gente que lo ejerce y lo ha mantenido vivo contra viento y marea en todos estos años.

31 de enero de 2016

www.madridiario.es. Declaraciones Alejandro Klecker01

www.madridiario.es. Declaraciones Alejandro Klecker02www.madridiario.es. Declaraciones Alejandro Klecker03____________________

1 de febrero 2016

madridiario 1 de febrero 2016.jpg

__________________

8 de febrero 2016

Aquí el breve reportaje de algo más de 2 minutos en „zoom telemadrid“ que podéis ver si pincháis en este enlace. 

 

 

 

Dieser Beitrag wurde unter andere autoren, arte, bildwirkereien, enlace, link, meinung, opinión, otros autores, tapices, tapiz, tapiz narrativo, teppiche veröffentlicht. Setze ein Lesezeichen auf den Permalink.

Schreibe einen Kommentar

Deine E-Mail-Adresse wird nicht veröffentlicht. Erforderliche Felder sind mit * markiert