Hubo entre nosotros quien, confiando plenamente en el poder hidrófugo de la capa de goretex de sus botas…
Nun, unter uns gab es diejenigen, die im voller Vertrauen auf die wasserabweisenden Eigenschaften der Goretex-Schicht ihrer Stiefel….
… und ihr Gleichgewicht… // … y su sentido de equilibrio…
….dieron grandes pasos //…grosse Schritte taten.
Y hubo los que, haciendo de la necesidad una virtud, se beneficiaron de los efectos positivos que tiene el agua fria sobre determinadas partes del cuerpo á la Kneipp…. // Und dann gab es diejenigen, die aus der Not eine Tugend machend, die wohltuende Wirkung eisig kalten Wassers auf bestimmte Körperteile nach guter Kneipp-Manier genossen…..
In Erinnerung an meine Mutter, die gekneippt hat, wann immer sich ihr die Gelegenheit dazu bot.
Va por mi madre, que siempre cuando tuvo la oportunidad de hacerlo, pisaba el agua gélida allá donde podía.
Para los que no lo sepan:
Sebastian Kneipp, sacerdote y médico naturista alemán. (17 de mayo de 1821, Stephansried, Alemania -17 de junio de 1897, Wörishofen). Fue uno de los precursores de la hidroterapia y de la medicina natural en el tiempo del Renacimiento, plasmando su doctrina conocida como la Cura de Kneipp, técnica más moderna que la desarrollada por Vincenz Priessnitz, que ha tomado fuerza actualmente dentro del marco de la llamada „medicina alternativa“.