Ahora que acompaño con el corazón dolido el destino incierto de la Real Fábrica de Tapices en Madrid, vuelvo sobre mi discurso de la importancia de este arte nómada para la historia del continente europeo. Porque si se pierde la Real Fábrica de Tapices no solo es la perdida de una institución que existe desde hace 300 años; es un paso más hacia la desaparición de un arte que en Europa tiene su relevancia desde hace más de 900 años, y en toda la historia, desde hace más de 3000 años. El que mucha gente conciba este oficio/arte como algo anticuado, radica en la gestión que se ha hecho de este patrimonio y en la tibia difusión que se ha llevado a cabo respecto de lo que el colectivo de artistas actuales hace hoy en día utilizando esta técnica.
Un regalo de verano: Tapices narrativos alemanes del románico
publicado en: Insel Verlag Leipzig, 1976.
encontrado en: Berliner Flohmarkt por Jj Sánchez, 2015
incorporado en la „biblioteca textil“ del KUKU de Aguilar de Campoo en julio de 2015.
Tantas y tantas veces, el arte ha sido _ y es_ vehículo para el conocimiento, las ideologías, las creencias, las reivindicaciones. Provoca, irritar, enfadar, embellecer, decorar, cuestionar…… El mensaje de cada objeto, la intención de cada artista, el uso de cada propietario puede gustar más o menos, pero siempre ha sido una potente herramienta de comunicación, de difusión, de intercambio, de aprendizaje, de debate constructivo….. también de ostentación, y de negocio;
En los vaivenes de la historia, de idas y venidas de gente, de conquistas, reconquistas, anexiones, separaciones….. todo lo móvil adquiere un alto valor, lo llevadero se puede salvar, se puede robar, en definitiva: se puede transportar.
Quizá por ello, siendo nómada de alma, los tapices me han podido robar el corazón.
El pequeño y precioso librito que me ha traído Jj de Berlín se centra en tres tapices narrativos, dos tejidos y uno de nudo, que pertenecen a los tesoros de la Catedral de Halberstadt y Quedlinburg. Datan de finales del siglo XII, principios del XIII. Como siempre cuando llega un testimonio como este libro a mis manos me emociono ante la pureza y por la belleza de estas obras tejidas.
Pero más que emocionarme me impaciento viendo todo el potencial desaprovechado que entraña para mí:
tapices, oficio, historia, cultura, territorio, románico, Europa, arte……
Es como estar delante de una ecuación del 1+1= ¿?
Y creo saberme el resultado.
Sin embargo, parece que soy la única que la ve, quizá por ser tan obvia, tan sencilla, tan cercana…… que nadie se para en ella.
Gracias a Heinrich L. Nickel, editor de este librito, y a la editorial INSEL, por hacer un hueco a este arte, gracias también a Leonie v. Wilckens y Katharina Klumpp, cuyas publicaciones ofrecen más información acerca de estos tapices para quien quiera buscarlos en las redes, gracias a Jj por tener mi amor al tapiz siempre presente y tener ojo de águila en los mercadillos de segunda mano, y gracias a la persona que liberó este libro sobre tapices románicos alemanes de su estantería para que pudiera llegar hasta Aguilar de Campoo, tierra de arte románico español.