cuando el frío se te mete en el cuerpo // wenn einem die Kälte in den Körper kriecht

Es gibt nichts Schöneres, als sein eigener Herr zu sein. Stellen wir das mal als eine unumstössliche Wahrheit hin, dann können wir uns  in aller Seelenruhe ein wenig die Schattenseiten ansehen, die ein Dasein als Selbständige(r) zwangsläufig mit sich bringt, nicht nur im Bezug auf die Tatsache, dass er es sich nicht erlauben kann, sich eine Magendarmgrippe zuzuziehen, sondern hinsichtlich solch alltäglicher Aspekte wie dem Heizproblem im Winter. Da gibt es keinen warmen Arbeitsplatz. Da werden alle zwei Stunden Wärmflaschen gefüllt, da wird mit Handschuhen an den Händen in die Tastatur gehauen (und manchmal daneben), da wird des öfteren ein Tee getrunken, weil nichts über die Wärme von innen heraus geht, und zur Not macht man sich warmen Gedanken.

Denn wenn man nicht gerade eine Werkstatt hat, wenn man sozusagen im Wohnzimmer arbeitet, was den wunderbaren Vorteil hat, dass man immer da ist, und Berufsleben mit Familienleben zu vereinbaren keine Schwierigkeiten aufwirft, dann  gehören zu den vielen nicht absetzbaren Unkosten unter anderem die Ausgaben für die Heizung. (Nun, natürlich bin ich mir bewusst, dass es viele Menschen gibt, die uner Kälte oder Hitze weit mehr zu leiden haben, als wir hier).

No hay nada mejor que ser su propio jefe. Una vez colocado en el pedestal de las verdades inamovibles, podemos dedicarnos a contemplar la sombra que proyecta a ras de suelo  la existencia, o mejor dicho la supervivencia como autónomo, y no sólo en materia de salud, dado que  un autónomo no se puede permitir pillar una gastroenteritis o una gripe vulgar, sino en aspectos tan cotidianos como el problema de la calefacción en el lugar de trabajo. No hay un puesto de trabajo calentito, porque sí. Aquí se llena la bolsa de agua caliente cada dos horas, se ataca al teclado (con más o menos acierto) con los guantes puestos, se toma algún que otro té demás, porque no hay nada mejor que sentir el calorcito expandirse por dentro, y cuando el frío aprieta, uno intenta pensar en algo capaz de producir una sensación de calidez.

Porque  si no tienes un taller o un despacho, si trabajas, por así decirlo, desde el salón (lo que entraña la maravillosa ventaja de „estár“ siempre, y no tener problemas a la hora de conciliar la vida familiarcon la laboral), entonces, entre los muchos gastos difíciles de justificar y a la hora de la verdad imposibles de desgravar fiscalmente, se encuentran los gastos de calefacción. (Sé que hay gente en este mundo que lo pasa mucho peor a causa del frío o del calor).

Debe haber sido el frío que se nos había metido en el cuerpo a Juanjo y a mí, el que nos hizo saltar durante la comida de un tema a otro y terminar, como no podía ser de otra manera, con el tema de situación económica, de los bancos, las cajas… En fin, de repente empezamos a delirar, supongo que a consecuencia del frío:

Resulta que nos imaginamos que el Estado , en vez de inyectar entre 30.000 milliones y 80. 0000 millones de euros con el fin de recapitalizar a bancos y cajas, decide repartir este dinero equitativamente entre todos los españoles. Ya véis qué delirio! En fin, con el frío metido en el cuerpo empezamos a hacer la cuenta para entrar en calor. Pusimos 50.000 millones de euros, 50.000.000.000 de euros y, para hacerlo fácil, porque con las neuronas frías tampóco era cuestión de meterse en operaciones complicadas, partimos de  50 milliones de españoles,  inclusive los ilegales pero quitando  los miembros de la Casa Real, que entendemos que tienen la vida resuelta, y algún que otro ex-político que ya cobra un sueldo vitalicio…  Según nuestra cuenta, y poco a poco entramos en calor, nos tocarían 1000 millones de euros a cada persona. Si seguimos aplicandonos un sueldo de mileurista, podríamos vivir 71.428,5714 años con este dinero.

Es muss an der Kälte gelegen haben, die uns bis  in die Knochen gekrochen war, dass wir beim Essen von einem Gesprächsthema zum nächsten gesprungen sind, um schliesslich, wie es anders kaum sein konnte, bei der gegenwärtigen Krise, den Banken und Sparkassen zu landen. Wie dem auch sei, auf einmal fingen wir an wirres Zeug zu reden, was meines erachtens nur an der Kälte gelegen haben kann:

Da stellten wir uns nämlich vor, dass die Spanische Regierung die Geldspritze von  zwischen 30.000 und 80.000 Millionen Euro nicht den  Banken und Sparkassen zugute kommen lässt, sondern diesen Betrag gleichmässig auf alle seine Staatsbürger verteilt. Hab ich’s nicht gesagt: totaler Wahnsinn….! Also so kalt wie uns auch war fingen wir an zu rechnen, von wegen warme Gedanken… . Also, wenn wir von 50.000 Millionen ausgehen, 50.000.000.000 Euros, und -um die angefrorenen grauen Zellen nicht zu überfordern, 50 Millionen spanischen Staatsbürgern, wobei der ein oder andere Illegale mit reinpasst und wir die Angehörigen der Königsfamilie und den ein oder anderen Ex-Politiker ruhig weglassen können  (die haben eh schon ausgesorgt), dann kämen wir quf die heisse Summe von 1000 Millionen Euro pro Person. Das treibt uns fast die Schweissperlen auf die Stirn. Wenn wir weiterhin von einem 1000-Euro Monatsgehalt ausgehen, was hierzulande absolut üblich ist, dann könnten wir von diesem Betrag  71.428,5714 Jahre lang leben.

.Wir brächten es auf 3000 Millionen Euro (ich hab immer noch die deutsche Staatsangehörigkeit). Uli und Lea haben noch ihr Leben vor sich, aber Juanjo und ich wären schon  froh, wenn wir es munter auf 90 Jahre brächten. Also noch 40 Jahre, um abzurunden. Wir rechnen anders herum: 1000 Millionen Euro durch 40 ergibt 250.000 Euro jährlich. Der reinste Wahnsinn! Dann bräuchten wir nicht mehr Lotto zu spielen.

Ich lass den Taschenrechner, verlass die Küche, mit der warmen Tasse heissen Tee und geh in die 12 Grad kalte Werkstatt zurück. Kälte ist gut für den Teint. Und ich muss zugeben, dass ich mir, seit ich selbständig bin, keine Grippe eingefangen habe. Das hab ich wahrscheinlich der Kälte zu verdanken.  

PS: Ihr braucht mir keinen Kommentar zu schreiben, ich weiss, dass es so nicht funktioniert. Aber ihr müsst selbst zugeben, dass es der reinste Wahnsinn ist, sich so etwas mal zu überlegen.

Nosotros nos juntaríamos con 3000 millones de euros. Uli y Lea tienen aún una vida por delante, y yo no estoy nacionalizada. Pero Juanjo y yo juntos,  no aspiramos a más que llegar bien a los noventa. Ponemos entonces 40 años, para redondear, y hacemos la operación al revés: 1000 millones de euros dividido entre 40, nos da 250.000 euros al año. Qué locura! Con eso ya no nos haría falta jugar al euromillon.

Total, dejo la calculadora, dejo la cocina, me llevo la taza de té y vuelvo al los 12 grados del taller. Sé que el frío es bueno para el cutis. Y tengo que reconocer que desde que me he dado de alta como autoempleada, no he pillado ni una gripe, ni gastroenteritis. Será que el frio espanta hasta los causantes de estos males.

PD: No hace falta que me pongáis un comentario, ya sé que no funciona así, pero tenéis que reconocer que es una auténtica locura imaginarselo!

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3 Antworten zu cuando el frío se te mete en el cuerpo // wenn einem die Kälte in den Körper kriecht

  1. Pues de cabrona nomás te voy a poner comentario…
    jaja…mirá…que eso no funcione así, mmmm…digamos que funciona parecido, pero distribuido entre unos pocos vale?, que los políticos y empresarios, siempre creen que repartirse la gran torta entre ellos los va a hacer felices, a ellos, a sus hijos, a sus parientes, pero no se dan cuenta que uno no puede vivir rico mirando por detrás de la reja a los pobres, entonces ,a delirio asquerosamente egoísta como el que estamos viviendo, no me parece para nada mal vuestros cálculos tiritando de frío…por lo menos aquí desde el bochorno de estos buenos aires!!! jaja
    que te propongo como ministra de economía, mujer!
    jaaaaaaj

  2. Diego sagt:

    Es cierto, y en tu caso sería genial porque la producción de arte es algo que sale de dentro y que no responde a motivaciones económicas, tu haces arte porque eres una artista, pero te aseguro que yo, que soy español, nacido jejeje con todo ese dinero no trabajaría…. ¿quién lo haría?, entonces ¿de que valdría el dinero?
    El dinero es deuda, por eso se lo dan a los bancos para que nos endeudoemos y tengamos la obligación de trabajar para devolvérselo, si nos diesen todo ese dinero a cada español, o nos vamos de España a disfrutarlo o creamos una nueva clase social que sólo compra por internet al extranjero, y claro tendríamos que tener nuestra huerta, nuestras gallinas, nuestras vacas, en nuestro terreno… ah que nadie vendería terrenos porque no les haría falta el dinero… en fin, que el dinero es ¿deuda?

    http://video.google.com/videoplay?docid=297944284192645565#

    • amilde sagt:

      Muy buenas, Diego. Ya sé que no funcionaría. Junajo propone que este dinero vaya a los bancos, vamos, a ingresar en una cuenta (hasta ahí los bancos conentos). Y que luego se entrega trimestralmente a cambio de una „memoria de actividades“, por ejemplo: en los últimos dos meses he leído el Don Quijote entero. Así se obliga a la gente a emplear tiempo en formación, en investigación, en relacionarse. Y estoy convencida que gente habría para todo, para salir con las ovejas al monte, para cultivar una huerta, para hacer casas, para hacer galletas y bizcochos, para desmontar y volver a montar tractores, para escribir, para pintar, para limpiar, hasta para planchar. Y si lo puedes haces porque „te sale de dentro“ y no por motivación económica, lo conviertes en arte, el arte de planchar, por ejemplo. Y disfrutas de ello. Y truequeamos…. Ya sé que no funcionará…. Hace algunas semanas, escuché en un programa de radio la anécdota de aquél misionero que iba a la Amazonía y viendo como trabajaban los indígenas para talar los árboles, se propuso traerles herramienta para facilitar la labor. Así lo hizo, y cuando volvió meses después preguntó qué tal les iba. Dijo el jefe de la tribu: Bien, bien, mucho mejor, porque tardamos mucho menos…. Pensó el misionero: Entonces podéis talar mucho más, y venderlo, y ganar dinero, y….. Dijo el jefe: Talamos lo mismo, porque no necesitamos talar más. Pero ahora tardamos menos y TENEMOS MÁS TIEMPO PARA HACER LO QUE NOS GUSTA! La cosa es saber lo que le gusta a cada uno y querer compartirlo con los demás, a cambio de la satisfacción de compartir, sin más.

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